Quien me conoce sabe que soy un gran admirador del holandés con sangre gaditana. En el Ajax era un auténtico espectáculo. La nueva joya de la prolífica cantera holandesa estaba llamada a ser la nueva figura del fútbol mundial. Pero un sorpresivo traspaso al Hamburgo, donde el nivel del jugador progresó pero no de manera esperada, apaciguó las ganas de ficharle.
Sin embargo, siempre rindió bien y el Madrid concretó su fichaje hace 1 año y medio por poco más de 10 millones. Empezó bien la temporada, colocándose como pichichi. Pero a Schuster no le convencía a pesar que el jugador era de los pocos con un criterio claro de que hacer con la pelota. Su polivalencia es extraordinaria. Juega tanto de organizador, como de volante, de mediapunta o de interior. Sea cual sea la posición que ocupe, siempre sabe que hacer con la pelota en los pies.
Este año se buscaba dar salida a los fichajes de Ramón Calderón, y sobretodo a los holandeses. Se han ido todos a excepción de Rafa y de Drenthe, aunque este último no tardará en partir.
Pellegrini no contaba, pero ha tenido que rectificar y dar minutos al Tulipán ya que es uno de los jugadores con más calidad en la plantilla. Su perseverancia y actitud han sido dignas de elogios y la verdad, me alegró muchísimo por un jugador al que admiro. Espero que triunfe y que se quede mucho tiempo en el Madrid, porque valer, vale.
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